Trastornos del sueño (Parte I)

Imaginaos por un momento que os notáis cansados, decidís ir a descansar y el sueño os vence rápidamente. Imaginaos que estáis durmiendo plácidamente; pero de repente, algo os inquieta y os despertáis sobresaltados. Abrís los ojos, empezáis a reconocer vuestra habitación, pero ocurre algo que os aterroriza: ¡Veis a un extraño ser sobre vuestro pecho que no os deja respirar! ¡No podéis mover vuestro cuerpo! ¡Y no podéis gritar! No os preocupéis, estáis siendo atrapados por el fenómeno de la parálisis del sueño.

www.shelleyradler.com

 Estoy seguro que más de uno habrá vivido esta experiencia en primera persona y habrá sentido pánico en varias ocasiones. Y es que así lo confirma el libro "Sleep Paralysis" (Editorial Rutgers) de la Dra. Shelley Adler (@SleepParalysis), profesora en el Departamento de Familia y Medicina Comunitaria en la Universidad de California (Estados Unidos), donde señala que entre un 25 y 30 por ciento de la población mundial ha tenido, al menos, un episodio de este tipo en sus vidas.

¿Pero en qué consiste realmente la parálisis del sueño? Pues bien, según palabras de la doctora, es un estado intermedio entre la etapa del sueño y de la vigilia, en la que nuestro organismo sufre una serie de cambios naturales y reguladores muy funcionales.

Durante la fase REM de nuestro sueño, nuestro cuerpo queda paralizado. Normalmente, no somos conscientes de este proceso. Sin embargo, hay ciertos momentos en los que es posible que nos despertemos inconscientemente y nos demos cuenta de todo lo que está sucediendo a nuestro alrededor: nuestas articulaciones carecerán de movimiento, nuestra boca será incapaz de emitir sonidos, nuestro pulso cardíaco se acelerará y con ello, empezarán a surgir misteriosas figuras a nuestro alrededor, fruto de nuestro imaginario.

Pero todo ello, tiene una clara explicación. La parálisis del sueño no es peligrosa. Realiza, entre otras funciones, el control del movimiento durante la fase del sueño. De otra manera, estaríamos continuamente actuando de forma involuntaria. Nos ilustra con un ejemplo el Dr. Stanley Krippner, profesor de Psicología en la Universidad de Saybrook en San Francisco (Estados Unidos), que fue entrevistado para el programa Milenio 3 (Cadena Ser):

"Pensemos en alguien que está soñando con una lucha y que no tuviera parálisis del sueño. Estaría golpeando y pegando a la gente que duermen junto a ellos y estarían actuando continuamente fuera del sueño. La parálisis del sueño desarrolla un comportamiento muy funcional al moderar el movimiento de las personas mientras están soñando… Por lo que la necesitamos. Es un buen fin.”

Es así, tenemos que aprender a convivir con ella. Por un lado, es creadora de terrores nocturnos; por otro, normalizadora de nuestras funciones más inconscientes.

"En ocasiones, viene acompañada de imágenes o alucinaciones muy reales y aterradoras. Y es que las personas que lo han vivido dicen que fue mucho más terrorífico de lo que nunca hubieran podido imaginar. Y que da mucho más miedo que leer un libro o una película de terror. Porque tu cerebro te produce la convicción de que realmente estás paralizado.“ (Dra. Shelley Adler).

(Continuará...)

Carlos Largo